20 VERSIONES DEL PASILLO.

Al fin un sueño se hacía realidad, sucedió un 12 de octubre de 1990, cuando Aguadas se vistió de gala para celebrar con júbilo El Primer Festival del Pasillo Colombiano. Fue una semilla sembrada en terreno fértil por ilustres personajes que tenían en sus ideales iniciativas que llevaran el bagaje cultural de Aguadas a confines universales. Personas que ahora no están entre nosotros pero que nos dejaron su esencia disponible. Aníbal Valencia Ospina como un quijote exteriorizó su sueño, Marino Gómez Estrada escucho sus clamores y sirvió de apoyo a sus ideales, un grupo de activistas culturales trabajaron hombro a hombro por hacer que El Festival del Pasillo Colombiano fuese una realidad. Aguadas se embriagó de pasillo que se mezcló con el aroma del más selecto café, con el inigualable y dulce pionono, y lució con orgullo el sombrero de toquilla tejido por tersas manos aguadeñas. Nuestra música se volvió omnipresente. Camino el pasillo por calles empedradas amuralladas por caserones de tapia, teja de barro y hermosos ventanales. Se filtro por los patios de túrgidos de rosales, margaritas y orquideas; traspasó cortinajes eurítmicos que dividían los espacios de ambientes solariegos, surcó montañas, bosques mares y continentes y llegó al fin del mundo, como se soñaba. Fue así como surgió una nueva era en la música colombiana impulsada por la fuerza de una idea y el compromiso de sus valedores, el certamen adquiría identidad e idiosincrasia plasmada por las imágenes bucólicas del maestro Aníbal y la participación de todo el pueblo. Hasta la versión 7 de 1997.
Una corporación liderada por la señora Dília Estrada de Gómez desde la capital caldense, asume las riendas del certamen buscando darle más altura y relevancia, llevando El Festival del Pasillo Colombiano a lindes culturales muy interesantes, sosteniéndolo hasta la versión 14 de noviembre 12 del 2004. Surge entonces el clamor de los aguadeños por retomar las directrices del certamen, aducen que se ha perdido algo de su idiosincrasia, no refleja el sentir del pueblo aguadeño, que en Aguadas están las personas idóneas con suficiente sentido de pertenencia aptas para liderar todos los procesos y que el Pasillo estaba perdiendo su cualidad de festival para convertirse en un encuentro de artistas.
Un comité liderado por la gestora cívica y cultural Elsy Marulanda Rincón, la Administración Municipal y un gran equipo de apoyo, rescata el Festival del Pasillo Colombiano para Aguadas y organizado por Aguadeños. A partir de la versión 17 de Agosto 15 del 2008, empieza una nueva era que cumple los parámetros trazado desde sus orígenes, la imagen gráfica tiene el componente artístico marcado por el maestro Aníbal, y continuado por Carlos Osorio, al Pasillo los envuelve un aire de modernidad, buen gusto, innovaciones y exquisiteces. El nivel artístico se eleva a ámbitos internacionales, la organización es milimétricamente coordinada y cada versión se supera en busca de la excelsitud imperiosa.
El Festival del Pasillo Colombiano llega ahora a la versión número 20, dirigida y coordinada desde la administración municipal en cabeza del señor alcalde Jorge Iván Salazar Cardona. Es un magno evento que resuena en el territorio nacional y explora confines, promueve y rescata la música autóctona y de paso pone muy en alto la idiosincrasia cultural de Aguadas. Estamos consientes que falta mucho camino por recorrer, otros ideales por alcanzar, pero el certamen ha adquirido madurez gracias la suma de experiencias. Este es parte de un sueño cumplido que espera sostenibilidad en el tiempo, el compromiso de personas con virtudes culturales que trabajen por El Festival del Pasillo Colombiano, y por ende, por Aguadas.